Nunca serán gratos los días en Universidad de Chile luego de perder ante Colo Colo, más cuando la mala racha en el estadio Monumental sigue creciendo año a año. Pero lo ocurrido en el último choque ante el archirrival provocó un verdadero sismo al interior del cuadro universitario, que suma y suma réplicas.

Apenas terminado el encuentro, algunos directivos se reunieron en el Centro Deportivo Azul para analizar la situación y el futuro de Santiago Escobar en la banca de la U. Había molestia y decepción, sobre todo por la forma en que había parado al equipo y las fórmulas que probó justo en el partido donde debía ir con más certezas que incertidumbres, más ideas fijas que apuestas, y más determinación que debilidades.

Este lunes -y mientras paradojicamente en la cancha central del complejo de la U, Colo Colo disputaba la final del Torneo sub 21 Más que una Pasión ante Audax Italiano- Michael Clark, presidente de Azul Azul, Cristián Aubert, director ejecutivo, Luis Roggiero, gerente deportivo y  Sachi se reunieron en las oficinas del segundo piso del complejo de La Cisterna.

Luego de analizar las tres derrotas consecutivas ante Ñublense, O'Higgins y el archirrival, Escobar puso a disposición su cargo pese a que apenas lleva cinco partidos al mando del equipo, donde ha cosechado seis puntos producto de sus victorias iniciales ante Unión La Calera y Deportes Antofagasta y más allá de ese optimista comienzo, se recalcó que nunca ha convencido su juego.

Más allá de la decisión del cafetalero, en la U no están tan convencidos de que la solución inmediata sea dejar partir a un entrenador elegido por Roggiero, luego de analizar varias posibilidades. Se supone hubo un estudio acabado para llegar al que sería el encargado de encabezar un proyecto que dejaría atrás los años negros donde los azules debieron lidiar con el descenso.

Es por esto que en La Cisterna apuestan a que Escobar continúe, más aún considerando que se viene el clásico universitario ante Universidad Católica como visitante, luego de enfrentar a Unión Española y Curicó Unido.

Y sobre todo, por la experiencia del año pasado, en que el equipo no levantó su nivel tras la partida de Rafael Dudamel y terminó salvándose del descenso en los descuentos del campeonato.

 

Sin embargo, una nueva derrota ante los hispanos dejaría sin respaldo alguno al estratega y, a partir de esta reunión, sin lugar a dudas comienza el vía crucis del colombiano al mando del plantel azul, salvo que revierta todo a partir de este fin de semana, algo que al menos se ve muy complicado.