Los iracundos e iracundas que cuestionan el VAR tienen una nueva razón para echarle pelos a la sopa. Y es una doble intervención del videoarbitraje en el encuentro que Universidad Católica le ganó a Huachipato por la fecha 24 del Campeonato Nacional (1-0), con una polémica secuencia que se inicia en el minuto 21 del primer tiempo.

Un desborde de Alfonso Parot terminó en un centro expulsado al córner. La UC cobró el lanzamiento del esquina, pero el árbitro José Cabero ordenó repetirlo, porque no había dado la orden con el pito. En ese momento, recibe el llamado de Nicolás Gamboa y Cristián Andaúr en el VAR, para que evalúe la acción anterior al tiro de banderín frente a un monitor.

La revisión advierte un roce imperceptible del balón golpeado por Parot en el brazo derecho de Benjamín Gazzolo. Cabero le hace caso al VAR y rigurosamente sanciona lanzamiento penal para los Cruzados, casi tres minutos después de la acción que dio origen a todo el protocolo. Pero lo más increíble estaba por venir.

Fernando Zampedri se puso frente al balón y al arquero Gabriel Castellón. El goleador argentino exhibió demasiado sus intenciones y el meta siderúrgico contuvo el disparo apenas moviéndose sobre su derecha. El Toro lamentaba su fallo mientras el balón volvía al ruedo, pero la repetición de la escena podía darle una nueva chance.

Esto, porque claramente se advierte que ¡siete! jugadores de Huachipato y la UC invadieron el área antes de que Zampedri conectara el balón. Seis acereros (Gazzolo, Osvaldo González, Joaquín Gutiérrez, Claudio Sepúlveda, Renzo Malanca y Nicolás Baeza) y uno cruzado (Clemente Montes). Pero ni el árbitro, ni los asistentes, ni el VAR se percataron.

La regla indica que en el caso de que jugadores de ambos equipos cometan una infracción en un lanzamiento penal, se repetirá la ejecución a menos de que una falta sea más grave que la otra. En este caso, Huachipato tiene más invasores, por lo que en cualquier caso la sanción debió ser la reiteración del disparo. Pero nada pasó.