Los que miraron Copa Davis a fines de los noventa y principios del 2000, se acordarán de él. Gorra hacia atrás, pelo largo y ropa ancha. Nicolás Lapentti fue un rival de temer en el tenis de aquellos tiempos.
Años han pasado, pero el ecuatoriano sigue ligado al mundo del tenis. Después de todo, viene de una familia con tradición en el deporte blanco y ha vivido con una raqueta en mano desde pequeño.
Justo este 13 de agosto, Nicolás Lapentti cumple 49 años. Edad suficiente como para hacer un repaso de algunos de sus momentos icónicos, más cuando éstos han estado ligados a Chile.
Bogotá y Viña del Mar
Para Nicolás Lapentti, el 11 de septiembre es una fecha de alegría. No por algún motivo político, sino que porque aquel día, en 1995, ganó su primer torneo como profesional.
Fue en Bogotá donde se alzó con el título, tras derrotar en la final al tenista local, Miguel Tobón (3-6; 6-1; y 6-4). Pero, lo que más llamó la atención del público fue que con 19 años, el joven ecuatoriano dejó afuera en cuartos de final a Marcelo Ríos.
Su carrera tuvo cuatro años siguientes sin conseguir un título. Sin embargo, una de sus noches más tristes sucedió en Viña del Mar. Allí, el tenista de la mitad del mundo perdió una batallada final con Fernando González, con dos tie break de por medio (6-3; 6-7; y 7-6 para el de La Reina).
De El Arrayán a Angostura
Lapentti no sólo es recordado en Chile por el tenis. Paradójicamente, su ligazón con el fútbol no tiene una relación directa, sino más bien paralela. Resulta que el ecuatoriano vivió un fugaz amorío con una modelo chilena, ex pareja de un conocido goleador de aquellos tiempos.
Se trata de Daniela Campos, la ex de Iván Zamorano, quien hizo noticia en Ecuador tras conocerse su romance, en 2002, con Lapentti. Ambos pasaron unas bellas vacaciones, ese año, en El Arrayán.
Para más morbosidad, Iván Zamorano fue el que dio pistas del nuevo amorío de Daniela Campos, en entrevista con TVN. “Ahora, le gusta otro deporte”, dijo Bam-Bam.

Fernando González e Iván Zamorano acompañando al Team Chile antes de los JJOO. A ambos los conoce Nico Lapentti, de una u otra forma | Photosport
Tiempo ha pasado de aquello y Nicolás Lapentti ha seguido yendo y viniendo a Santiago. Ya no por tener un amorío con Daniela Campos, ni con nadie (hasta donde se sabe), pero sí por el propio deporte que le dio tantas alegrías.
De hecho, en 2019 estuvo en otro hito importante para nuestro país. Lapentti fue el invitado de honor en el partido de exhibición que sostuvo con Marcelo Ríos, en la celebración de los veinte años del logro del número uno de la ATP.
El duelo se jugó en el Gran Arena Monticello y vio al Chino llevarse la victoria con un parcial de 6-4, 5-7 y 11-9. Marcelo Ríos, celebró, de esta forma, el hito que lo llevó a ser reconocido mundialmente.
De la Antigua Grecia al filósofo Lapentti
Ya llegando al tiempo presente, Nicolás Lapentti se ha desempeñado como entrenador en el deporte blanco. Es por eso que hizo una reflexión filosófica sobre un aspecto específico de la actividad tenística.
“No es que bromeamos, pero siempre lo decimos: los tenistas somos de los pocos jefes que le pagan a alguien para que te digan lo que tienes que hacer“, filosofó Lapentti.
“Entonces, para el entrenador también es difícil, porque muchos entrenadores por cuidar su trabajo no te aprietan o no te dicen lo que realmente deberían decirte“, cerró su reflexión.