El berlín es una preparación dulce originaria de la repostería de Alemania, Austria y Europa Central. Su nombre varía dependiendo de la región, en algunos lugares se los conoce como berlinesa, berlina, borla de fraile, bollo, suspiro de monja, pavita y tantos otros creativos nombres.

La masa de los berlines es similar a la de las donuts, pero en este caso el relleno va en el interior. En Chile se comen con manjar, crema pastelera o mermelada. Además, existe la versión frita y horneada.

Revisa a continuación una receta fácil de berlines fritos.
 

¿Cómo hacer berlines?

Ingredientes

  • 4 tazas de harina sin polvos
  • 1 cda. de azúcar
  • 2 cdts. de levadura instantánea
  • 1 taza y 2 cdtas. de leche tibia
  • 2 huevos
  • 42 gr. mantequilla sin sal
  • 2 cdts. de sal
  • Aceite para freír
  • Manjar
  • Crema pastelera
  • Mermelada
  • Azúcar flor
     

Preparación

En un recipiente grande agrega la harina, el azúcar, la levadura, la sal, la leche, los huevos y la mantequilla. Une todos los ingredientes con las manos, hasta obtener una masa homogénea.

Deja la masa reposando en un recipiente cubierto con papel alusa durante 1 hora.

Pasado ese tiempo, la masa habrá doblado su tamaño. Sácala del recipiente y estírala hasta formar un rollo alargado. Corta con un cuchillo en porciones iguales.

Toma una de las porciones y aplástala con los dedos. Luego, dobla los bordes hacia adentro. Voltea la porción, para que los dobleces queden hacia abajo y comienza a amasar en forma circular con una mano, hasta obtener una esfera.

Enharina una superficie con harina y coloca sobre ella todas las esferas. Cubre con un paño y deja reposar por 20 minutos.

Pasado ese tiempo, pone aceite a calentar. Cuando esté listo, deja caer los berlines muy cuidadosamente. Cuando estén dorados por un lado, dales vuelta para que se frían por ambos lados.

Sácalos del aceite y déjalas en papel absorbente para quitar el exceso de aceite.

Cuando los berlines alcancen una temperatura apta para tomarlos, haz un corte horizontal en el centro y rellena con manjar, crema pastelera o mermelada.

Finalmente, espolvorea con azúcar y listo, ya puedes disfrutar de tus berlines caseros.