Gustavo Lorenzetti llegó a la Universidad de Chile en el segundo semestre de 2011, convenciendo desde un primer minuto al exigente Jorge Sampaoli y convirtiéndose en una de las figuras de ese cuadro que ganó el Clausura y la Copa Sudamericana.

Sus buenas actuaciones lo pusieron en la mira del entonces entrenador de la selección chilena, Claudio Borghi, que pensó en el Duende para vestir la roja de todos.

En el 2012 llamó Jaime Vera, ayudante de Borghi en la selección, y me dijo que si me iba a nacionalizar porque había una chance de convocatoria. Sinceramente no lo sentí, pero no quería cargarme de una responsabilidad extra”, le confesó el actual volante de Deportes Iquique a Leonardo Burgueño en su programa Lado B en Youtube.

Agregando que "sé lo difícil que es extranjero y ser nacionalizado en una selección, y no quería cargarme con esa presión.

Igualmente Lorenzetti cuenta que se sintió muy valorado por la oferta y se queda con ese recuerdo.

"Lo pensé y dije que no, pero estaba agradecido y fue una satisfacción de saber que estaba haciendo las cosas bien en la U", cerró.