El nuevo presidente de la ANFP, Pablo Milad, aseguró que se está trabajando para que la selección chilena dispute amistosos internacionales antes del inicio de las Eliminatorias Sudamericanas, programado para octubre.
Reinaldo Rueda tendrá que esmerarse al máximo para tener el contingente necesario que le permita jugar en Europa, que es el único lugar en el que se han reactivado las competencias internacionales en el mundo.
De hecho, Chile solo puede aportar once jugadores que juegan en el Viejo Continente, por lo que la Roja tendrá un estrechísimo margen de acción, si no le permiten agregar jugadores que vengan desde México o el fútbol sudamericano.
"No podrá ser acá en Chile, por eso hay planificar, y no sólo planificar en un país, sino que en varios países donde nos permitan entrar y poder jugar como sudamericanos", explicó el nuevo timonel del fútbol chileno en conversación con RedGol.
Por lo pronto, los jugadores disponibles permiten apenas parar un equipo. Siempre y cuando aquellos jugadores que han terminado sus ligas se mantengan en Europa, como ha sido el caso de Enzo Roco, Mauricio Isla y Fabián Orellana.
De esta manera, la Roja podría formar en el eventual apronte con Claudio Bravo en el arco; Isla, Gary Medel, Guillermo Maripán y Roco; Erick Pulgar, Charles Aránguiz, Arturo Vidal; Fabián Orellana, Junior Fernandes y Alexis Sánchez.
¿Hay banca? Muy poca. Niklas Castro (Aalesund de Suecia), Lawrence Vigouroux (Leyton Orient de Inglaterra) y Francisco Sierralta (Empoli de Italia) están en Europa. Y también podría sumarse Esteban Pavez (Al Nasr de Emiratos Árabes).
Lo cierto es que no es momento de ponerse quisquillosos, ya que si no hay partidos, la selección chilena cumplirá un año sin salir a la cancha y tendrá que jugarse la vida a ciegas en el comienzo de las eliminatorias, contra Uruguay y Colombia.
