La historia se repite pues tal como pasó en 2015 y 2016, la selección chilena se llevó el título de la Copa América al imponerse sobre Argentina aunque esta vez fue en la modalidad de Fútbol 7 y tampoco fueron necesarios penales pues un marcador de 2-1 en el tiempo reglamentario les dio la consagración.
La Roja de esta especialidad se había clasificado al partido definitivo con un gran triunfo ante Brasil para prepararse para la definición contra la Albiceleste, que en este torneo fueron anfitriones, para reavivar una rivalidad que en los últimos años ha sido más que relevante en el fútbol sudamericano.
Los nacionales fueron bastante superiores y lo lograron plasmar en el marcador por medio de Henry Calderón al minuto 25 mientras que las ventajas se alargaron gracias a José Matzner en la fracción 32 para poner las acciones bastante favorables.
Sin embargo, Argentina vendió bastante cara su derrota pero apenas sobre el final fue que pudieron descontar gracias a Tévez pero ya era muy tarde y no pudieron evitar que el título viniera para nuestro país.
De esta manera, Chile se hace con esta tercera edición de la Copa América de Fútbol 7 para unirse a Perú (2016) y Ecuador (2018) como los campeones de esta competición que da sus primeros pasos aún en el concierto continental.
