No exageran quienes dicen que la selección chilena de rugby se encuentra en la antesala del momento más importante de su historia. En julio y noviembre, los Cóndores contarán con dos opciones de clasificar por primera vez a la Copa Mundial, que se realizará en Francia el próximo año, y la expectativa aumenta minuto aminuto.
Uno de los factores que ha marcado la oportunidad de oro con la que cuentan los nacionales ha sido la revolucionaria preparación de su head coach, Pablo Lemoine, que contó un capítulo extremo el pasado fin de semana en la Región del Biobío.
Es que el representativo nacional se puso a prueba ante el cuerpo de Infantes de Marina de la Armada de Chile, en el Fuerte O’Higgins de Talcahuano, instancia en la que los seleccionados realizaron un duro entrenamiento físico y mental, pero sobre todo orientado a fortalecer el espíritu de equipo de los Cóndores.
El Centro de Entrenamiento Básico del Cuerpo de Infantería de Marina fue el escenario para 18 horas de trabajo continuado que acreditaron el tesón de los rugbistas. El capitánJaime Gómez le entregó al plantel un banderín que debía defender contra toda amenaza, antes de iniciar un circuito de acondicionamiento y entrenamiento físico.
Los Cóndores se jugarán su opción mundialista en julio ante Estados Unidos y luego tendrán una última oportunidad en el repechaje en noviembre
Los seleccionados apenas tuvieron descanso antes de realizar una maratónica marcha nocturna de 35 kilómetros, y estar nuevamente en pie a las 5:00 horas de la madrugada, cuando debieron arrastrar un pesado camión por una serie de pendientes.
El cierre vino por la mañana, con una competencia entre patrullas a bordo de botes anfibios y el tradicional salto de confianza al mar desde un buque y el regreso al Fuerte O’Higgins, donde el coach Lemoine recibió a los suyos completamente equipados y cargando sus embarcaciones.
La selección chilena de rugby desarrolló un entrenamiento extremo con los Infantes de Marina en Talcahuano
El balance fue el mejor. El jefe del Centro de Entrenamiento, capitán Jaime Gómez, valoró “el trabajo en equipo y el liderazgo, que son absolutamente esenciales para lo que hacemos en el Cuerpo de Infantería de Marina y también fundamentales para un equipo de rugby”.
“Cuando uno ha tenido la oportunidad de liderar un equipo, sabe lo valioso que es contar con un grupo que colabore, se lleve bien y navegue en una misma dirección”, completó la autoridad militar.
COMENTARIOS