Carlos Alcaraz es una realidad. Dejó de ser la promesa del tenis mundial para meterse entre los mejores tenistas actualmente, luego de derrotar al noruego Casper Ruud en la final del Masters 1000 de Miami por 7-5 y 6-4.

El español, llamado en su país a ser el sucesor de Rafael Nadal, mostró un gran juego, mucha garra y sobre toda sangre fría durante todo el campeonato, para jugar los puntos decisivos con la mentalidad de un crack del tenis, lo que es aplaudido por todos los especialistas.

En la previa del decisivo encuentro, recibió la sorpresa del regreso a Estados Unidos de su entrenador Juan Carlos Ferrero, quien debió viajar a España hace cinco días debido al fallecimiento de su padre. Por eso se estrecharon en un abrazo muy grande en las tribunas luego del título.

Con esta corona ganada en Estados Unidos, quedará a un paso de ingresar por primera vez en su carrera al top ten, un logro que a sus cortos 18 años demuestra que estará en la elite del tenis mundial en los próximos años.

Por ahora amanecerá 11 en el nuevo ranking que se publica este lunes, a solamente 10 unidades del británico Cameon Norrie, por lo que prontamente entrará al selecto grupo del que se estima que no saldrá por mucho tiempo.

En Miami, Alcaraz conquistó su tercera corona del circuito ATP. Anteriormente ganó en Umag, en julio del año pasado, mientras que este 2022 ganó en Río de Janeiro luego de una fácil final con Diego Schwartzman.