El Super Bowl es un momento que todos los fanáticos de la NFL esperan, ya que reúne a los dos mejores equipos de la temporada. En esta ocasión, Philadelphia Eagles y Kansas City Chiefs definirán al campeón, en un partido que también contará con una particular historia: la de los hermanos Jason y Travis Kelce.

Super Bowl 2023: La historia de los hermanos Kelce

A pesar de que el Super Bowl se juega desde 1967, este 2023 será la primera vez que hermanos se enfrenten en el terreno de juego. El único antecedente similar ocurrió en el 2013 con Jim y John Harbaugh, quienes se midieron como entrenadores de San Francisco 49ers y Baltimore Ravens, respectivamente.

Jason y Travis no se criaron en una familia que tuviera alguna conexión directa con el mundo de la NFL. De hecho, sus padres estaban ligados a lo bancario y siderúrgico. Cuando sus hijos quisieron dedicarse al fútbol americano, ellos no dudaron en apoyarlos y vaya que les salió bien la jugada, ya que ambos han logrado ganar el Super Bowl. Jason lo hizo en 2018 con los Eagles y Travis en 2020 con los Chiefs. Uno de ellos usará un segundo anillo el domingo.

No todo fue fácil

Jason es el mayor con 35 años e inició su carrera en el año 2011, al ser seleccionado en sexta ronda por los Eagles. Travis con 33 años, fue seleccionado por los Chiefs en tercera ronda del año 2013. Ambos fueron a la Universidad de Cincinnati, pero el camino no fue fácil. En el año 2009, Travis fue expulsado del equipo al dar positivo por drogas. Jason intervinó con el entrenador para que no lo echara y lo obligó a mudarse con él para vigilarlo. Así siguió su carrera.

Ambos jugadores se han mantenido toda su carrera en los mismos equipos y en la final de este año, Jason y Travis tendrán la oportunidad de lograr un Super Bowl más. Pase lo que pase, será el tercero de la familia Kelce. Muchos incluso aseguran que podrían ser candidatos en un futuro al Salon de la Fama de la NFL.