Durante la transmisión de la exhibición que jugaron Alejandro Tabilo y Rafael Nadal el pasado viernes, Nicolás Massú, quien hizo de comentarista, señaló que esperaba jugar en casa por las Qualifers de la Copa Davis. Era su gran objetivo para un sorteo que se avisoraba complicado para Chile debido al nivel de los posibles rivales.

Croacia, Francia, Estados Unidos, Argentina, Alemania, Gran Bretaña, Serbia o República Checa estaban dentro de los posibles rivales del seleccionado nacional liderado por el Nico. Sin embargo, el destino no fue tan cruel con nosotros y este domingo quedó sentenciado que finalmente Chile jugará con Kazajistán en esa instancia, con el gran aliciente de ser locales.

Es así como Chile tendrá la posibilidad de volver a jugar en el Grupo Mundial, o las Finals como se le llama actualmente, luego de cuatro años de ausencia. La última vez que lo hizo fue en 2019, luego de ganarle en una recordada serie a Austria como visitantes, con un gran triunfo de Cristian Garín en el último punto.

El nivel de Kazajistán

Eso sí, a no confiarse. El equipo kazajo posee tenistas de primer nivel, tanto en dobles como en singles. Liderados por el irreverente Alexander Bublik (37° en singles) y Andrey Golubev conAlexandr Nedovyesov (47° y 53° en dobles), podrían complicar a los chilenos.

Sin embargo, el factor de la localía podría ser especialmente favorable para Chile, ya que se trata de jugadores más acostumbrados a las canchas rápidas. Es por eso que seguramente la elección del equipo capitaneado por Massú será ponerles la cancha más lenta posible.

Esto, especialmente porque Bublik ha manifestado en reiteradas ocasiones el particular odio que le tiene a las canchas lentas.“Espero que esta gira acaba pronto y venga ya la hierba. Odio la tierra batida, odio esta superficie, ojalá no volver a pisarla en diez años”, señaló apenas iniciada la gira arcillera en el Masters 1000 de Montecarlo

Vale recordar que Chile y Kazajistán se verán las caras el 3 y 4 o 4 y 5 de febrero del 2023, una vez finalizado el Australian Open y previo a la gira sudamericana de torneos sobre Arcilla que finalizará con el Chile Open, que se jugará desde el 27 del mismo mes.

En caso de ganar, Chile se meterá entre los 16 equipos que jugarán la fase de grupos de las Finals. Una instancia que se debiese jugar en Málaga y que se llevará a cabo desde el 11 de septiembre del próximo año.

Sin embargo, en caso de perder, los nacionales deberán volver a jugar una llave por el Grupo Mundial II. Instancia que se jugará en la misma fecha de la fase de grupos de las Finals, es decir desde el 11 de septiembre.