Los argentinos no lo pueden creer. Y si el dolor llegó desde Nóvgorod a Buenos Aires, qué decir de lo que pasó en el Fan Fest de Moscú, donde varios centenares de hinchas trasandinos llegaron a ver el encuentro por pantallas gigantes y al ritmo de la música electrónica.
El panorama era perfecto para aquellos que no habían conseguido un boleto o no tenían en sus planes el viaje a Novgorod, al norte de Rusia. Pero aunque zafaron del papelón en el estadio, no se libraron del duro golpe que representó la victoria de Croacia por 3-0, que dejó a Messi y Sampaoli con un pie fuera del Mundial.
Ni bien terminaba el partido, cuando los fanáticos comenzaban a abandonar el recinto que fue acondicionado para recibir a los hinchas de todas las nacionalidades. Si bien no hubo mayores enfrentamientos con los brasileños, la molestia quedó graficada en las caras bajas y un silencio extraño.
Cuando terminó la jornada, los argentinos emprendieron rumbo a sus hoteles o lugares de alojamiento con un mar de dudas en la cabeza. Como pensar si hacer el viaje a San Petersburgo, donde la Albiceleste puede sentenciar su eliminación el próximo martes ante Nigeria.
Fotos: Javier Ramírez-Musella, enviado especial a Moscú