Llegó el día en que al Real Madrid le tocó un arbitraje polémico en contra. El cuadro merengue jugó ante el Valencia y el juez Gil Manzano decidió invalidar un gol en el último minuto de juego.
Literalmente, la pelota estaba entrando en el arco cuando el árbitro decidió silbar el final del encuentro. Los jugadores del Real Madrid corrieron a encararlo y en seguida se armó una trifulca tremenda.
Nadie lo podía creer. El cobro insólito dejó al Real Madrid sin los tres puntos y con los jugadores desconcertados pidiendo que Gil Manzano retrotrayera su decisión.
Uno de los que reclamó con mayor ímpetu fue Jude Bellingham. El inglés había anotado y se sintió perjudicado directamente por el cobro del árbitro. Pero además, tras encarar aireadamente a Gil Manzano, se ganó la roja.
Las palabras del inglés
Este domingo se rebeló el informe arbitral del encuentro del Real Madrid y el Valencia. Entre los incidentes, llamó la atención la razón de la roja a Bellingham. El juez dio el detalle de lo que dijo el crack merengue.
“Tras la finalización del partido y aún en el terreno de juego, se dirigió hacia mí corriendo y en actitud agresiva y a gritos, repitiendo en varias ocasiones ‘it’s a fucking goal’ (es un puto gol)”, señaló el informe.
Tras conocerse estos detalles, el Real Madrid aseguró que, de todas formas, apelará a la sanción en contra de Jude Bellingham, aunque cabe incluso la posibilidad de que el castigo se haga mayor.
Pese a su expulsión, el crack merengue fue respaldado en su equipo, siendo Carlo Ancelotti uno de sus férreos defensores. “El jugador ha sido claro en lo que ha dicho, obviamente se ha acercado de manera vehemente después del gol como es normal después de lo que ha pasado, pero no ha sido un insulto en absoluto”, opinó.
Las sanciones derivadas de insultos y de protestas a los árbitros en el código disciplinar de La Liga sancionan con hasta un mes las conductas como las mostradas por Bellingham. Habrá que esperar la resolución final.