Liverpool vivió un duro golpe en el gran momento que atraviesan y perdieron 3-2 ante West Ham que sigue sorprediendo en la Premier League, un resultado que les sirve para subirse en el tercer lugar el cual le quitaron a los de Jürgen Klopp, que se vieron perjudicados por dos terribles errores de Alisson Becker.

El guardameta de los reds empezó una jornada para el olvido a los cuatro minutos en un tiro de esquina desde la izquierda que se fue cerrando y midió muy mal, rozó la pelota pero la mandó al fondo de su portería y a pesar de reclamar falta ni el VAR lo salvó del enorme fallo con el que se abrió el marcador.

Sin embargo, los de Anfield lograron la igualdad cuando se acercaba el final de la primera mitad gracias a un preciso tiro libre de Trent Alexander-Arnold desde el borde del área. El golpeo fue sutil por encima de la barrera dejando al portero Lukasz Fabianski sin ninguna reacción mientras entraba por el ángulo.

El segundo tiempo fue redondo para los hammers que en la fracción 66 armaron un rápido contragolpe en el que Pablo Fornals definió de gran manera un mano a mano tras un pase filtrado de Jarrod Bowen.

El mismo Bowen envió el centro con el que West Ham amplió la ventaja al 74', también de tiro de esquina, mandando un centro que complicó a Alisson y Kurt Zouma cabecó para el gol. Divock Origi marcó a siete del final pero no fue suficiente para que Liverpool se quedara con 22 puntos y sus rivales lo superen con 23. El líder es Chelsea con 26, seguidos por Manchester City al 23.