El campeón Liverpool se está tomando con mucho relajo la parte final de la Premier League, y aquello lo aprovechó Arsenal este miércoles.

Pasa que el defensa central más caro de la historia, el neerlandés Virgil van Dijk, se equivocó feo en la salida y le regaló un gol a los Gunners.

El pilar de los Reds quería darle un pase a un compañero, pero se enredó y la pelota le quedó al francés Alexandre Lacazette, que no perdonó a Alisson Becker.

Liverpool sólo juega por el récord en la Premier, muy relajado, mientras que Arsenal tiene que ganar para aspirar a clasificar a torneos internacionales.