Un tremendo escándalo sacude al fútbol de Ecuador pues una de las grandes figuras que tiene su torneo local, Gabriel Cortez, fue detenido en un procedimiento policial en el que capturaron a 18 integrantes de una peligrosa banda de sicarios en la que el delantero, presuntamente, es uno de sus miembros.
La organización criminal denominada Los Tiguerones cayó en medio de una operación llamada Poseidón en la que se incautaron armas, celulares y drogas. Posteriormente, Patricio Carrillo, Ministerio del Interior, se refirió a una situación que sorprendió a todos dentro del fútbol meridional.
“Existe la participación de un conocido deportista quien nosotros creemos que no solamente tiene participación, sino era quien ordenaba y recibía la información respecto a las personas que los sicarios habían agredido privándoles de la vida”, manifestó el funcionario público.
El atacante, también conocido como el Loco, tiene siete goles en ocho compromisos disputados en la temporada del fútbol ecuatoriano siendo el máximo artillero de la competición en la que su equipo, Barcelona de Guayaquil, actualmente se encuentra en la primera posición con 19 unidades.
De momento, el club no ha dado a conocer una postura oficial pero de momento el futbolista estará detenido hasta que comience su proceso judicial que determinará su futuro personal y deportivo.
