La Superliga de Europa al parecer vive sus últimos días, pese a que recién fue anunciada. Tal ha sido el repudio mundial para el certamen, que es muy complicado que la idea se llegue a desarrollar.

Por ejemplo, dos de los equipos ingleses participantes, Manchester City y Chelsea, se preparan para renunciar a la organización, a ellos se pueden sumar más equipos.

Otro de los 12 elencos fundadores es Liverpool, equipo que tiene los días contados en la Superliga, debido a que sus jugadores se reunieron, y liderados por el volante Jordan Henderson, dieron a conocer su malestar por la creación del evento internacional.

"No nos gusta y no queremos que suceda. Esta es nuestra posición colectiva", dice un comunicado publicado por los futbolistas de los Reds en sus redes sociales.

Luego aclaran que "nuestro compromiso con este club de fútbol y sus seguidores es absoluto e incondicional".

De esta manera, se suman potentes voces en contra de la Superliga, que al parecer se quedará como una idea y nunca será desarrollada como estaba pensado.