El empate entre Santos y Boca Juniors en la semifinal de Copa Libertadores sigue dejando polémica. Los argentinos no pudieron hacer respetar su localía y dejaron la llave más que abierta ante los brasileños, quienes pudieron irse con algo más.
Esto porque en el minuto 74' de juego Carlos Izquierdoz fue a pelear una pelota con Marinho en el área xeneize y lo terminó dejando en el suelo. La situación inmediatamente fue reclamada por el peixe, pero Roberto Tobar optó por no revisarla en el VAR y quedarse con lo que le dijeron sus asistentes..
Esto tiene en llamas a la directiva del cuadro brasileño, quienes este jueves anunciaron una queja formal ante la Conmebol para exigir explicaciones por el actuar del árbitro chileno y sus colegas en la cabina de la tecnología.
A través de un comunicado, el equipo señaló que "el presidente del Santos FC, Andrés Rueda, envió una carta al presidente Alejandro Domínguez y al responsable del Comité de Arbitraje de la organización, Wilson Seneme, solicitando acción sobre lo ocurrido en el partido ante Boca Juniors, en La Bombonera, por la primera semifinal de la Libertadores".
El propio mandamás del peixe explicó que "una vez más asistimos a un episodio que no se corresponde con las recientes mejoras, inversiones y pilares de desarrollo de la Conmebol en los últimos dos años". Como si fuera poco, encararon a la entidad a responder por qué no se utilizó el VAR.
"Solicitamos que esto ya no ocurra. Son dos clubes muy grandes, dos de los equipos más grandes del mundo, y eso se interpone en el camino del espectáculo. Queremos que las tecnologías se utilicen bien y que todos sean tratados por igual", recalcó Rueda.
Al reclamo del Santos se sumaron el presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol, Rogerio Caboclo, junto con el de la Federación de Fútbol de Sao Paulo, Reinaldo Carneiro. Esto, para presionar aún más a la Conmebol a dar una respuesta concretar a lo ocurrido.
