El derbi de la ciudad de Turín entre Torino y Juventus se definió por tan solo un gol en favor de la Vecchia Signora que los afirmó en el primer lugar de la Serie A en un duro compromiso y con la presión de la victoria del Inter.

El único tanto llegó al minuto 70 a manera de redención de Matthijs de Ligt, quien venía siendo criticado pues aún no había cumplido del todo con las expectativas que generó su costoso fichaje desde el Ajax.

El defensor holandés tomó el balón en el corazón del área luego de un cobro de tiro de esquina pasado pero que volvió a centrar con un cabezazo de Gonzalo Higuaín para mantener viva la jugada.

De Ligt, sin embargo, también tuvo sobre sí un poco de polémica pues cometió una mano que pudo ser penal pero ni siquiera fue revisada en el VAR. Juventus se anotó la victoria y mantuvo el liderato en Italia.