Luis Enrique se alejó de toda diplomacia y criticó la vuelta del fútbol sin público, asegurando que todo es un negocio al fin de cuentas.

Es más, graficó todo asegurando que el deporte rey sin gente en las gradas "es más triste que bailar con tu propia hermana".

En declaraciones al programa español Colgados del aro relató que "vi el fútbol alemán y es lamentable. Se escuchan los insultos y se pierde la intimidad de los buenos momentos, pero hay que entender que esto es un negocio que genera mucho dinero, y a pesar de que el espectáculo dista de cuando se juega con gente, puede ayudar a pasar el encierro".

Respecto a lo que le toca, Luis Enrique cuenta que "en teoría, la Selección debería tener partidos amistosos en septiembre siempre y cuando se restablezca la normalidad. Lo importante ahora son otras cosas y a esperar".