El delantero de Boca Juniors, Ramón Ábila, vivió un complicado momento el pasado fin de semana al ser alertado por su familia en Córdoba de una amenaza de muerte anónima.
Según da cuentaOlé, el jugador recibió en su teléfono celular advertencias de un posible secuestro y amenazas de muerte en contra de sus más cercanos. El delantero presentó la denuncia ante la policía el pasado domingo y se encuentra con custodia de los uniformados.
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Sin embargo, el periodista de TNT Sports,Martín Costa, informóque tuvo una comunicación con el delantero, quien le indicó que no recibió ninguna amenaza, ni llamado telefónico, pero si su familia un llamado de posible secuestro.
Más allá de este complicado episodio, Wanchope arribó este mediodía a Buenos Aires tras su descanso en Córdoba, y por la tarde se presentará a la práctica del equipo.
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