Este lunes por la noche Independiente de Avellaneda arribaba con altas expectativas a la ciudad de Bahía para enfrentar al club que lleva el mismo nombre por la fase de grupos de la Copa Sudamericana.

Pero el aterrizaje se transformó en una pesadilla. El equipo quedó varado en el aeropuerto, pues siete jugadores y el segundo entrenador, Pedro Monzón, arrojaron positivo por Covid-19.

Después de seis horas, una parte del plantel pudo entrar a Brasil, pero los que habían sido contagiados debieron dormir toda la noche en el aeropuerto.

Independiente había sufrido un brote de coronavirs hace un mes, pero los jugadores ya habían superado la enfermedad y los habían dado de alta en Argentina. 

Finalmente, estos futbolistas debieron regresar a su país y la Conmebol resolvió que el partido que estaba fijado para este martes se juegue el miércoles a las 19:15 horas.

"Parte de la delegación fue al hotel a descansar y otros quedaron retenidos de manera arbitraria en el aeropuerto. Las autoridades sanitarias de Bahía nos han maltratado sin razón alguna, dejándonos varados por más de seis horas", dijo en un comunicado Independiente.

Luego, añadieron: "Todos los que conforman el viaje han sido testeados el sábado y se han presentado los estudios para viajar y disputar el encuentro. Lo ocurrido, ajeno a Independiente, ha generado una demora insostenible, alterando la rutina y el descanso de nuestro equipo antes de un partido".

En tanto el ex Colo Colo, Chaco Insaurralde, reclamó en su Instagram: "¿Somos delincuentes?", y colgó una foto del equipo duermiendo en el piso del aeropuerto.

Para más remate, Independiente no podrá contar con su entrenador Julio César Falcioni, quien se quedó en Argentina por problemas familiares, mientras Omar Piccoli tampoco viajó. El que quedaba era Pedro Monzón, pero también fue retenido por el Covid-19. Fernando Berón viajará de urgencia a Brasil para hacer las veces de entrenador.