El Flamengo de Mauricio Isla y el Palmeiras de Benjamín Kuscevic se enfrentan en el estadio Centenario de Montevideo para definir al nuevo campeón de la Copa Libertadores 2021. El Verdao llega defendiendo su condición de actual campeón, mientras que el Mengao fue campeón en una épica final en 2019 y busca volver a levantar el tan ansiado trofeo.

Pero todas las miradas justo en la antesala del partido se las llevó el delantero rojinegro Gabriel Barbosa, quien una vez más demostró que no le teme a nada y confía plenamente en las condiciones de él y sus compañeros de equipo para volver a conquistar el fútbol sudamericano y levantar una vez más el tan anhelado trofeo en la definición de este sábado en Uruguay.

Esto porque Gabigol aprovechó el ingreso a la cancha, para aprovechar su turno de pasar junto a la inmensa copa para acariciarla, acción que para los sensatos es evitada para evitar la mala suerte, pero el ariete carioca no cree en maldiciones y ya lo demostró anteriormente.

Acción acontecida en la final ante River Plate jugada el 23 de noviembre de 2019, donde tampoco le tuvo miedo a la muerte y se la jugó tocando el apetecido trofeo sin haberlo ganado antes. Sin embargo, eso no le trajo mala suerte, todo lo contrario.

Tras la acción de su artillero, el cuadro de Río de Janeiro  dio vuelta el partido de manera increíble. Duelo donde los Millonarios arrancaron ganando con un gol al minuto 14 de Rafael Santos Borré y el Mengao lo terminó dando vuelta con un doblete de Gabigol en el 89' y 90+2'.

Por ende, los hinchas rojinegros seguramente estarán ilusionados en que el goleador se ponga nuevamente la capa de superhéroe y les de un nuevo título de la Copa Libertadores para las vitrinas del Mengao, que podría ser la primera en la carrera del chileno Mauricio Isla.