Este pasado martes el Tribunal de Disciplina de la ANFP sancionó al jugador de Colo Colo, Leonardo Gil, con una fecha de castigo tras los incidentes ocurridos luego de la derrota del Cacique ante Palestino en el Campeonato Nacional, duelo arbitrado por el réferi Fernando Véjar.
El juez no cobró un penal por codazo a Gabriel Costa, generando la furia de Colo Colo. De hecho, el utilero Nelson Pizarro fue castigado con tres fechas. En conversación con Radio Cooperativa, Alejandro Musa, miembro de la Primera Sala del Tribunal de Disciplina informó que incluso el funcionario albo ofreció pelea al cuerpo arbitral.
“En el caso del utilero la sanción fue mayor porque el cuarto árbitro y el árbitro ratificaron que el señor Pizarro, además de insultarlos, fue donde estaban ellos e incluso invitó a pelear al cuarto árbitro y al primer asistente, por eso tiene las tres fechas de castigo”, comentó Musa.
Respecto al camarín de los árbitros, cerrado con un candado tras el duelo, manifestó que “existen muchas obligaciones para los clubes locales para el desarrollo y la etapa previa al desarrollo de los partidos, pero obviamente nunca vamos a encontrar una norma que diga que esté la llave del candado de la puerta del camarín de los árbitros. No hay ninguna que diga relación que debe estar a disposición un camarín de árbitros o debe haber una persona dispuesta para asistirlos, algo en ese sentido”.
Complementa que “entonces, no existiendo en las bases del torneo algún tipo de infracción a ese respecto no podemos aplicar ninguna sanción, sin perjuicio de eso que consideramos que es un hecho grave. Acordamos como Tribunal enviar una comunicación a la Gerencia de Competiciones y, eventualmente, al directorio para que en una próxima modificación de las bases se considere algo en términos un poco más amplios en relación a la obligación del club local de poder garantizar el ingreso a camarines de los árbitros”.
Por último, y respecto al caso de Leonardo Gil, sentenció que “él negó que hubiera salido del camarín y negó que hubiera tenido comunicación o insultado al árbitro. Se determinó que el señor Gil se había asomado a la puerta del camarín, salido un paso de la puerta en ropa interior y le había dicho al árbitro, más que con insultos, se puede ver lo que está en el informe, recriminándole algo del respeto al club grande, que siempre los cagan, me disculpan las palabras”.