La carrera de Esteban Paredes está llegando a su fin. El goleador histórico del fútbol chileno salió de Coquimbo Unido, pero aún no ha anunciado su retiro del fútbol. Si bien muchos lo dan por hecho, Visogol manifestó que no está preparado mentalmente todavía para anunciarlo y que dará una respuesta final cuando vuelva de sus vacaciones con sus hijos en Estados Unidos. Mientras, Santiago Morning salió al baile y le ofrece una última pasada en el club que lo vio nacer hasta fin de año. 

Ante esta opción, Johnny Herrera intentó darle un consejo al que fuera uno de sus más grandes rivales en cancha. “Hay muchos jugadores que quieren seguir jugando fútbol porque no tienen nada más. No sé cuál será la realidad de él. Uno debe ser sabio para abandonar la carrera e irse lo mejor posible. Yo me retiro casi a los 40 años y jugué todo el año en Everton, 32 partidos. Seguí tras salir de la U por no darle en el gusto a estos gallos, por un deseo de mi mamá que me dijo que jugara, porque era lo que más me gustaba. Lo hice, fui feliz, demostré que estaba para seguir y me retiré. En mi caso fue para demostrar que estaba en condiciones y que la gente que estaba en la U estaba muy equivocada. El tiempo me dio la razón, se tuvieron que ir todos ellos y dejaron la U hecha un desastre”, comentó el ex portero en Todos Somos Técnicos, de TNT Sports. 

Y continuó: “Paredes no ha tenido tanta continuidad, ha estado lesionado. Creo que cuando ascendió el año pasado con Coquimbo era un buen minuto. El físico pasa la cuenta a los 40 y tantos, yo juego ahora un partido de tenis y termino ahogado. Un mes afuera y cuesta mucho echar a andar la máquina de nuevo”, reflexionó. 

Además, recalcó que “nadie te prepara. Yo traté de irme preparando para hacer otras cosas, sostenerme económicamente y darle un buen pasar a mi hijo. El futbolista, donde generalmente tiene poca educación, es desconfiado. Se rodean de hueones. El mejor ejemplo es Arturo Vidal, le pasó a Zamorano con la ciudad deportiva. En Everton le aconsejé a un par que pusieran plata en un APV (Ahorro Previsional Voluntario), por ejemplo.

 

Finalmente, recordó que “en Everton me tocó ver una realidad muy parecida a un equipo de segunda o tercera. Vi a Colo Colo entrenar en Argentina y todos con guantes, todos con cortavientos, todo como corresponde. Es difícil el cambio de un equipo grande a otro. Hace 20 años en Corinthians faltaban zapatos, bajaron un estante y tenían de todos los modelos posibles, algo impensado en muchos clubes hoy acá”.