Claudio Bravo tomó la titularidad en Colo Colo en un momento de crisis y, no exento de errores, se fue haciendo un camino exitoso. A tal punto que fue campeón ante Universidad de Chile, vendido a España y el resto es historia conocida tanto en Europa como en la Selección Chilena. 

No obstante, esto bien pudo cambiar de manera drástica: Colo Colo pensó en echarlo cuando aún estaba en divisiones inferiores porque no convencía. 

Así lo ratificó Eduardo Lobos, su compañero en el Cacique, en El Deportivo de La Tercera. “Sí. Claudio no era tan alto y había entrenadores que no le gustaba, por su personalidad, por cómo jugaba, porque era bajito. Ahí el que lo defendió fue Julio Rodríguez y claramente no estaba equivocado. A Miguel Riffo también lo querían echar”, confirmó. 

Asimismo, Lobos expresó que “no sé si después de Claudio llegue algún arquero a jugar a esos niveles. Es muy difícil. Sigo apostando por Brayan Cortés, en la medida que tenga un preparador de porteros que le saque el mayor rendimiento posible en cuanto a la evolución del fútbol. En la medida que encuentre un preparador que le saque su mayor rendimiento, será fundamental”. 

Claudio Bravo se fue de Colo Colo directo a España como gran figura en uno de los títulos más emblemáticos del Cacique: en el Apertura de 2006 ante la U en el inicio del tetracampeonato de la era de Claudio Borghi.

Claudio Bravo se fue de Colo Colo directo a España como gran figura en uno de los títulos más emblemáticos del Cacique: en el Apertura de 2006 ante la U en el inicio del tetracampeonato de la era de Claudio Borghi.

También recordó que su propio futuro pudo ser diferente. “Hasta el 2003 yo era el que jugaba hasta que me lesioné. Era el arquero con más proyección del fútbol chileno, estaba en la Selección, pero todo pasa por algo. Me lesioné en la Copa Libertadores jugando contra Boca Juniors en el Monumental, donde perdimos 1-2. Después no comienza Claudio porque estaba lesionado, contratan a Johnny Walker. Luego Claudio empieza a demostrar todas sus cualidades. A mí me alegra muchísimo porque soy amigo de él, me alegra mucho todo lo que han conseguido, evolucionado, todo lo que creció deportivamente y como persona. Nunca voy a saber lo que hubiese pasado si no me lesionaba”, meditó. 

Claudio Bravo en el Colo Colo 2005, poco antes de comenzar su despegue definitivo.

Claudio Bravo en el Colo Colo 2005, poco antes de comenzar su despegue definitivo.

Y sobre el estilo, destacó que “los dos tuvimos la formación de Julio Rodríguez, que viene con la metodología holandesa. Tiene que ver con el juego con los pies, la toma de decisiones. El juego aéreo siempre lo tuvo, solo que después lo fue mejorando. Fue mejorando el riesgo de cuándo salir a cortar. La lectura de juego, el atreverse con los pies, tiene mucho que ver con Rodríguez. Después Claudio tuvo muy buenos entrenadores en la Real Sociedad, en el Barcelona, en el City. Todas esas cosas van mejorando”. 

“La gente ve que también desde atrás se pueden construir ocasiones de gol y, por ende, también conseguir goles en base a ese tipo de juego. Y hoy en día la gente creo que disfruta cuando ve a los porteros jugando desde atrás, sacando el balón limpio, no sintiendo la presión que sienten la mayoría de porteros en esa posición” - Claudio Bravo en 2019 sobre el juego que se hace en el Manchester City.  

LA ESCUELA HOLANDESA

Además de compartir en el Monumental, Claudio Bravo y Eduardo Lobos tienen otro gran factor en común: la “crianza” futbolística que les otorgó Julio Rodríguez, basada en la escuela holandesa y que prioriza el juego con los pies. 

“Tiene que ver con la base formativa que nos dio Julio, donde la importancia del arquero con el juego con los pies era muchísima, de ser un líbero, de entender y leer bien el juego. De tomar buenas decisiones. Y también tiene que ver con atreverse. Porque cuando Julio trajo esa metodología en el año 1995, ningún entrenador de cadetes aguantaba que nosotros jugáramos con los pies, estaba prohibido que jugáramos de sobrepique. Tiene que ver con nuestra personalidad, de Claudio, Felipe Núñez y Víctor Loyola, de respaldar a Julio en esa forma que tenía de ver el fútbol. Nosotros creíamos que era la correcta. Me encanta que mis equipos salgan jugando. Le doy la responsabilidad para que jueguen”, manifestó el retirado portero sobre el estilo. 

“La esencia principal del portero sigue siendo atajar. Eso no va a cambiar. Que uno le vaya dando otros matices, dando herramientas como el juego de pies, la del sobrepique porque es más rápido, va más bajo el balón. De jugar más adelantado porque el equipo nuestro está presionando en mitad de cancha. Hay que darle un equilibrio. Eso lo da el entrenador con la concepción de juego que pueda tener. Tiene que ver con las herramientas que le da al equipo. He visto arqueros que salen a hacer paredes casi a mitad de cancha y eso no tiene ningún sentido. Tiene que ver con responsabilidad, buena toma de posición. Entender el juego y tomar una buena decisión”, concluyó.