La frase de que el fútbol da revanchas le cae como anillo al dedo a Sebastián Pérez, el arquero de la Universidad Católica que tomó la posta de Matías Dituro y que ha sido clave para que el elenco cruzado esté a las puertas de un tetracampeonato.

Para eso deben sumar un punto ante Everton este sábado en Viña del Mar, un partido que lleva a la hinchada de la Cato a recordar lo que ocurrió el 2010, cuando en la última fecha vencieron por 5-0 a los ruleteros en San Carlos de Apoquindo.

En ese encuentro, el arquero de los viñamarinos era justamente el Zanahoria Pérez. Con apenas 20 años, hacía sus primeras armas en Primera División, pues el titular era Gustavo Dalsasso. Sin embargo, en esa última fecha no tuvo un encuentro feliz y con esa fea goleada en contra descendió a Primera B.

Pérez luego debió dar una vuelta larga antes de llegar a un club grande de Chile. Estuvo en Melipilla, Puerto Montt, Palestino, volvió a Everton y pasó por Iquique, donde sus buenas actuaciones llevaron a la Católica a confiar en sus condiciones.

Nadie pone en duda hoy su titularidad, e incluso la hinchada ha coreado su nombre en algunos partidos. Seguramente para la próxima temporada llegará otro portero para darle más competencia al puesto, pero el Zanahoria ya sabe lo que es el peso de pararse bajo los tres tubos del arco cruzado.

Once años después, la mesa está servida para que a Pérez la moneda le caiga del otro lado, demostrando que la perseverancia y el trabajo rinden frutos.