En el programa Vive Redgol, que se emite todos los lunes a las 23 horas a través del canal Vive de VTR y en las plataformas multimedia de Redgol, el conductor Rodrigo Herrera fue muy duro contra Hernán Galíndez por la forma en que salió de Universidad de Chile.

"Jugar con la fe pública es una de las actitudes más deleznables que puede tener un ser humano. Involucra sentimientos, causas y motivaciones, sobre todo que son transversales. ¿Quién podría estar de acuerdo en que se validen en el fútbol chileno las amenazas?", comenzó señalando el periodista.

Indicó que "siempre se debe acoger a quien denuncia este tipo de actos y prestarle la asistencia para que denuncie, y por supuesto acompañarlo en el proceso. Pero es bastante bajo jugar con esa sensibilidad, con esa exposición, para conseguir objetivos personales. Y eso fue exactamente lo que hizo Hernán Galíndez en la Universidad de Chile". 

Agregó que "durante semanas su representante trató de sacarlo del club en virtud de supuestas amenazas que no existieron sobre el caso de Byron Castillo, que hacían que su familia corriera peligro, que lo estuviera pasando muy mal y que ni siquiera pudiera salir a comprar al supermercado".

"Una realidad que es muy diferente a la que nosotros vivimos, porque Byron Castillo podría pasearse por el Paseo Ahumada sin ningún problema y nadie lo reconocería. Para nosotros ya fue el tema", añadió Herrera de manera enérgica.

Por eso mismo es que manifiesta que "no se puede jugar con las amenazas de la manera que lo hizo el futbolista para sacar esa pequeña ventaja, que le permite ahora estar en el fútbol de su país. Aquello lo deja mal como persona y también involucra a una institución tan importante como la U, que en un principio no manejó el tema".


Herrera va más allá de Galíndez y como seleccionado de Ecuador, cree que cerrará puertas en Chile. "Le hace un daño enorme a los futbolistas ecuatorianos, que a lo mejor en el futuro van a tener una chance de querer venir acá y va a estar este precedente nefasto de un futbolista que en seis meses aportó poco y que se fue por la puerta de atrás inventando una amenaza".