Tras el partido que terminó con un empate 1-1 de U. de Chile en su visita ante Carabobo, voces azules tomaron la palabra. Uno de ellos fue Charles Aránguiz, quien valoró el punto obtenido por cómo comenzó el duelo.
“Fue un buen punto para nosotros, es un viaje bastante largo, humedad, lluvia…”, rescató el Príncipe en relación al desafío en Venezuela. Pero tras cartón, Gustavo Álvarez tomó la palabra con un análisis totalmente distinto.
“La cancha estaba rápida, el partido tuvo distintas variables, empezamos con dominio, vino la jugada del penal y ahí el partido se empareja. El penal nuestro equilibra el resultado y decido conservar la estrategia, pero con características más ofensivas”, analizó de entrada.
No se conformó con el empate
Gustavo Álvarez no escondió su molestia por el resultado y pese a lograr igualar un duelo que partió perdiendo, manifestó que sin los tres puntos el sabor es amargo en la U.

Universidad de Chile venía de derrotar a Estudiantes.
“Vinimos a ganar, siempre la ambición es sacar los tres puntos, siempre que se empata hay dos puntos perdidos. Tenemos la obligación de imponer la idea y ganar en todas las canchas”, golpeó la mesa el DT.
En cuanto a sus llamativos cambios ofensivos en el entretiempo, el entrenador azul explicó que “Maxi Guerrero le daba explosión en banda, Altamirano daba espontaneidad en vez de Poblete, que es mixto, y Leandro Fernández en una defensa cerrada tiene remate”.

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“Este es un plantel muy maduro, les pedí tranquilidad, no salirnos del plan tras recibir un gol”, cerró el argentino, quien junto a su equipo figura en la cima de su grupo en Copa Libertadores.