Gerardo Pelusso es un personaje del fútbol sudamericano y uno de sus pasos recordados, es el que tuvo por Universidad de Chile. Ahí tuvo una importante influencia en Walter Montillo.
El retirado entrenador dirigió en importantes clubes del continente, como Emelec, Alianza Lima, Nacional de Montevideo, Olimpia, Independiente de Santa Fe y Deportivo Cali, entre otros. Cuenta con grandes títulos e historias. Una de ellas, está ligada a un querido jugador azul.
Gerardo Pelusso y su relación con Walter Montillo
En el 2010, tras el fallido paso de José “Pepe” Basualdo, Universidad de Chile se la jugó por Gerardo Pelusso como nuevo entrenador. El uruguayo arribó a Santiago y buscó interiorizarse en lo que era el plantel. Entre ellos estaba Walter Damián Montillo.
“Hubo una cuestión ahí muy linda que pasó entre nosotros yque coincidió con su mejor rendimiento. Cuando yo llegué a la U. de Chile, a mí me gusta preguntar todo. Yo quiero saber todo y conocer todo de mis jugadores. Más de una persona me dijo ‘Montillo es un puede ser y nunca concreta nada’. ‘Es un talentoso, pero vive lesionado’, me dijo otra persona”, explicó Pelusso a Emisora Bullanguera.
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“Así que la primera conversación que tuve a fondo con él le dije exactamente esto. Le digo ‘¿cuántos años tenés?’. Creo que estaba con 24 años ahí y le digo ‘bueno qué estás esperando para ponerte a jugar a la pelota, porque amagás, amagás y no concretás nunca. Es ahora o nunca. Si no, te vas a quedar en la mediocridad’“, recordó el DT uruguayo.
Walter Montillo llevaba dos años en Universidad de Chile, pero algunas lesiones habían frenado su evolución pese a ser campeón en 2009. Con Pelusso en la banca, el argentino alcanzó su peak de rendimiento y a mediados de 2010, terminó siendo transferido a Cruzeiro tras alcanzar la semifinal de la Copa Libertadores.
Walter Montillo se retiró en 2021 en U. de Chile. Imagen: Photosport
“Después cuando lo vi jugar dije ‘este es todo talento. Acá hay que jugar a la pelota, yo no quiero más excusas. Si tuviera 18 o 19 años, te esperamos, pero ya no. Nadie te va esperar, es ahora o nunca’. Y fue ahí, lo hizo él. Su talento, su calidad humana. Un pibe divino. Yo lo quiero mucho“, cerró Gerardo Pelusso.
