Un partidazo en San Carlos de Apoquindo, donde Universidad Católica y Unión Española cierran la jornada de domingo, en un partido con aires de derbi.

Los cruzados se pusieron temprano arriba en el marcador, gracias a un buen gol de Diego Valencia, luego de una habilitación de Gonzalo Tapia.

La gran polémica del compromiso se produjo en el complemento, cuando el árbitro Felipe González cobró un penal para los hispanos, luego de una mano en el área de Germán Lanaro, tras un disparo de Ibáñez.

La controversia se instaló porque el juez luego de ir a mirar la jugada en el VAR tomó la decisión de que era pena máxima, y muchos compararon la jugada con la de Gabriel Suazo en La Serena, donde no pitaron el penal.

Pese al empate parcial de Víctor Felipe Méndez luego vino el desnivel cruzado, mediante la aparición de Tapia.