Las nefastas consecuencias económicas y laborales provocadas por el avance de la pandemia del Covid-19 en Chile aún se sienten con fuerza y los intentos del Gobierno por tratar de paliarlas parecen ser insuficientes.

La ampliación por los meses de enero y febrero del Ingreso Familiar de Emergencia y el Bono COVID si bien fueron un salvavidas para muchas familias, no llegaron a la gran mayoría de las y los residentes del territorio nacional.

Es en este contexto que desde el Congreso surgió la idea de generar un tercer retiro de 10% de los ahorros previsionales de las cuentas de cada afiliado de las AFP.

En concreto, son dos los proyectos que buscan un tercer retiro. El primero fue presentado por la diputada Pamela Jiles, quien ya presentó las dos mociones anteriores.

Las claves del texto son las mismas de los retiros anteriores: una reforma constitucional transitoria con la que se busca que cada usuario de la AFP pueda sacar entre 35 UF y 150 UF, universal, sin pagar impuestos, y se incluye pago forzoso de las pensiones de alimentos.

La segunda propuesta vino desde el partido Federación Regionalista Verde Social, con un proyecto muy similar al de la controvertida diputada Jiles, la diferencia es que se incluyen a los pensionados por Rentas Vitalicias y un bono para que el Estado reponga el dinero en las cuentas antes de la jubilación.

Las ideas podrían entrar al debate recién desde marzo, cuando se acabe el receso legislativo.

Cualquiera de los textos que entren en la discusión de la Cámara contará con el gran enemigo del Gobierno, quienes ya enviaron la segunda propuesta de retiro del 10% al Tribunal Constitucional, el cual finalmente declaró inconstitucional la medida.

Cabe consignar que, una de las consecuencias de los dos retiros de ahorros previsionales, es que cerca de 3 millones de compatriotas se quedaron sin dinero en sus fondos de pensión.