La derrota de Chile ante Uruguay, con gol al minuto 82 de Edinson Cavani, caló hondo en la esperanza de los hinchas que veían el camino abierto al tricampeonato de la Roja.

Sin embargo, la caída por 1-0 no debe ocultar los objetivos que sí alcanzó el equipo de Reinaldo Rueda, quien decidió sacar a cuatro titulares del equipo.

Aquí van cinco motivos que le dan la razón a Reinaldo Rueda frente a su arriesgada opción de prescindir de Arturo Vidal, Mauricio Isla, Jean Beausejour y José Pedro Fuenzalida.

1. Chile igual iba a enfrentar a Colombia

Chile se iba a encontrar con Colombia en cuartos o en semifinales, porque así lo dispone el cuadro de la Copa América. Es decir, Chile no evitaba a Colombia. La única opción era salir terceros y enfrentarse a Brasil.

2. ¿Querían recambio?

La selección terminó jugando con una defensa que promedia 26 años. un objetivo que siempre ha perseguido Rueda y que salió medianamente airoso del choque ante una de las mejores delanteras del mundo.

3. Cuidar a Gary Medel

Medel jugó con el muslo roto ante Brasil en el Mundial 2014. Ayer optó por salir ante una leve contractura, para no perderse lo que queda. Rueda tuvo la valentía para hacerlo y optar por los jóvenes.

4. El objetivo son las eliminatorias

Rueda ha dicho que la Copa América debe ayudar a fortalecer el equipo para las eliminatorias. Y ayer jugaron Díaz, Maripán, Lichonvsky, Opazo, Pulgar y Castillo, todos con edad suficiente para dos mundiales más. Nadie se atrevió a tanto.

5. Dosificar fuerzas

Aunque Chile perdió un día de descanso (jugará el viernes y no el sábado), Vidal, Beausejour, Isla y Fuenzalida descansaron. Colombia descansó a 10 de sus 11 titulares en el último partido con Paraguay.

6. Cercanía

Sao Paulo no solo tiene un clima menos tropical que Salvador de Bahía, donde se jugará el cuarto de final de Perú-Uruguay. Además queda a solo cinco horas (contra 26 de Salvador), por lo que la Marea Roja podrá estar presente sin problemas.

7. Rueda y Colombia

Chile tiene técnico colombiano y Colombia técnico portugués. Para Reinaldo Rueda será un doble desafío representar una escuela de entrenadores que estuvo 30 años al mando de su selección y hoy suma siete (los ciclos de Pekerman y Queiroz) sin hacerlo.