El 3 de septiembre de 1989 cambió para siempre la historia del fútbol chileno, con el por entonces arquero de la Selección como protagonista: Roberto Cóndor Rojas y el fatídico Maracanazo en las Eliminatorias para Italia 1990.

El para muchos mejor arquero chileno de todos los tiempos tuvo un mano a mano con RedGol, donde no eludió ningún tema, y rememoró aquella negra jornada de Río de Janeiro.

 

El Cóndor, desde Sao Paulo n diálogo con La Redgoleta, recordó los episodios de corrupción de la FIFA y Conmebol de los últimos años para hacer un paralelo con su historia.

"Los países pequeños como Chile o Perú, Paraguay, teníamos que luchar dentro y fuera de la cancha. El tiempo me dio la razón. Por lo que pasó en los últimos años, y eso se vivía en esa época. Los jugadores decían que las situaciones eran complicadas, y éramos perjudicados. Fue por mostrar que de una forma errada podíamos tener un buen resultado, pero no es por ahí la cosa. Pero cuando estás delante de una máquina poderosa, el tiempo me dio la razón", dijo Rojas a nuestro medio.

El ex meta de Colo Colo siguió hablando sobre aquel partido con Brasil: "Se cayó en esa estupidez que podíamos derrotar a una institución mafiosa, y por muchas décadas se perjudicó a países pequeños. Cuanto tiempo Chile tenía que luchar y nos robaban. Fue ese afán de querer ganar ante cualquier lugar ante esas instituciones corrompidas".

El castigo

Tras aquel episodio en Maracaná, Roberto Rojas fue castigado de por vida, y su carrera, que apuntaba para ser transferido a Europa, se acabó.

"Independiente de tener algo en la mano, la actitud no fue la correcta, errada, pagué caro por eso, pero son las consecuencias que siempre converso con los jóvenes. Las consecuencias las pagas más adelante, las cosas fueron así y las asumí con el tiempo. Son errores graves, independiente del sector que las comete. Actitudes erradas te llevan a momentos difíciles, mi carrera no tenía precio, y lo pagué", comentó.

"En esa época terminaba contrato el 4 o 5 de ese mismo mes de septiembre. Terminando ese partido tenía que venir a Sao Paulo porque tenía que firmar el contrato de renovación. Ahí un club francés necesitaba un arquero, y me iba a poner en ese negocio para irme a Europa, y vino ese partido y quedó en nada, porque fueron situaciones distintas. Siempre eran especulaciones, pero nada concreto. Lo que sabía era cambiarme por un jugador para irme a Europa, reveló.

Acerca de su sufrimiento por el hecho dijo que "cuando vas a todos los medios no es fácil, pero es el costo que pagas por un error. También quería tener la condición de mirar a mis hijos y decir que todos cometemos errores, pero si no asumimos. Errores todo el mundo ha tenido, y tenemos que demostrar que hay que enfrentarlas de frente".

Rojas como siempre lo quisiste ver, no ocultó nada en RedGol.