El balance de Reinaldo Rueda para la participación de Chile en el último Preolímpico Sudamericano es positivo. El técnico de la selección nacional asegura que los jóvenes pueden ser herederos nada menos que de la Generación Dorada de la Roja.

“El futuro del fútbol chileno tiene una generación ambiciosa que hereda las características de la generación ganadora de la última década”, sentenció el entrenador colombiano en referencia a la selección Sub 23, que quedó fuera de la fase final por diferencia de goles.

“Es un grupo que promete mucho. Si tienen continuidad y las posibilidades en sus clubes, el futuro de Chile va a ir bien. Este equipo ilusiona, invita a soñar. Creo que serán una gran alternativa en esta clasificatoria a Qatar”, valoró Rueda.

“Ocho o nueve de ellos ya han compartido en la selección adulta. Son el fruto de una gran inversión para el futuro del fútbol chileno con lo hecho tanto en Toulón como en este Preolímpico. Y a este grupo se podrían sumar (Víctor) Dávila y (Francisco) Sierralta”, advirtió.

La valoración de lo hecho en el Preolímpico fue especialmente positiva, pese a que el resultado no permitió luchar por los boletos a Tokio 2020. Pero además superaron la serias complicaciones en la preparación para dejar una buena impresión.

“Nos deja ese sabor agridulce de saber que expuso un buen fútbol al superar las expectativas por los factores adversos por todos conocidos. Fue un equipo con mucha entrega, con mucho carácter y fue gratificante el comportamiento conductual y futbolístico”, completó Rueda.

La selección chilena hará a fin de mes un miniciclo de preparación con miras a los duelos que abrirán las eliminatorias, contra Uruguay en Montevideo el 26 de marzo y frente a Colombia en Santiago el 31.