Chile cayó ante Honduras en San Pedro Sula en un partido donde comenzó muy bien y se quedó totalmente en el segundo tiempo. En el compromiso, Reinaldo Rueda aprovechó para probar varias piezas y sorprendió con la titularidad de Diego Rubio, así como también con la capitanía de un Paulo Díaz totalmente empoderado.

La Roja cumplió una ordenada etapa inicial con un 4-2-3-1 con Eduardo Vargas retrasado y en una línea con César Pinares a perfil cambiado y Jean Meneses para dejar a Rubio arriba. En la contención, en tanto, dijeron presente Claudio Baeza con Charles Aránguiz.

A los 18’ una jugada preparada traería los abrazos: córner de Meneses, pivoteo de Rubio y Alfonso Parot marcó su primer tanto con la Roja apareciendo en el segundo palo.

 

 

En el segundo tiempo, Fabián Coito movió todo el mediocampo e ingresaron Carlos Pineda, Alexander López, Jonathan Rubio y Rigoberto Rivas, los que ayudaron a darle un refresco a los locales que comenzaron a merodear la portería defendida por Claudio Bravo.

Así fue como a los 72’ llegó la paridad merecida. Cayó un centro tras una detenida, se queda Alfonso Parot y los durmió Alberth Elis ante las dudas de Claudio Bravo en la salida.

Chile intentó la reacción y Paulo Díaz tuvo una mediavuelta, pero a los 79’ Rigoberto Rivas le ganó la posición a Parot, sacó el centro y Jonathan Rubio irrumpió para poner el 2-1 que lo gritaron con todo. Diego Valdés, viniendo desde el banco, lo pudo empatar pero cabeceó tan mal como solo a los 85’.

 

Honduras se jugaba mucho para subir en la clasificación FIFA y disputar un cupo al Mundial y lo demostró. El segundo tiempo le enlodó a Rueda en algo una pasada que, hasta el pitazo del entretiempo, parecía una muy buena doble jornada para la Roja.