Luego de que Colombia y Argentina declinaran realizar la Copa América este 2021 por razones sanitarias a raíz de la pandemia del coronavirus, la Conmebol en una medida desesperada eligió justamente al país con más contagios de la región para llevar a cabo el tradicional torneo: Brasil.

De todos modos se tomaron las medidas para evitar los contagios en este ertamen continental y uno de ellos era el estricto acceso a las burbujas de todas y cada una de las selecciones participantes.

El 20 de junio estalló el escándalo en la concentración de la selección chilena. Las versiones de prensa apuntaban a una supuesta fiesta, indisciplina y hasta la presunta renuncia del entrenador Martín Lasarte, todo esto a 24 horas de enfrentar a Uruguay en Cuiabá, misma sede utilizada por la Roja en el Mundial 2014.

Con el correr de las horas quedó al descubierto que los hechos decían relación con la presencia del peluquero local Luis Fernando Goncalves, el que ingresó a la concentración nacional para cortarle el pelo a varios cracks de la Roja, entre ellos Arturo Vidal, Gary Medel y Eduardo Vargas.

"La Federación de Fútbol de Chile y el cuerpo técnico de la Selección Chilena Masculina Adulta, reconocen el incumplimiento de la burbuja sanitaria de la delegación que participa en la Copa América, con el ingreso no autorizado de un peluquero que, pese a contar con examen PCR negativo, no debió haber entrado en contacto con los jugadores. Los involucrados serán sancionados económicamente", comunicó la autoridad del balombié nacional en ese momento.

Pasaron los días y el famoso Goncalves le dio una entrevista a Las Últimas Noticias, donde confesó que fue contactado por Turbomán a través de un jugador de Cuiabá, asegurando que no hubo fiestoca como había trascendido. "El día que yo fui no hubo fiesta. Se fueron a sus piezas cuando terminé. Me hice PCR ese mismo día antes de ir al hotel. Me salió negativo y pude subir", indicó.

 

Uno de los apuntados, Arturo Vidal, hizo sus descargos. "En Chile uno ya está acostumbrado, siempre nos buscan cosas donde no las hay. Sabemos que cometimos un error con lo del peluquero, no lo quisimos hacer con maldad... Ya está. No se tiene que hacer y no lo volveremos a hace", afirmó.

En definitiva la Conmebol fue piadosa y sólo impuso una multa de 15.000 dólares a la Federación de Chile por romper la burbuja sanitaria en Cuiabá.