Cada vez queda menos para que los Juegos Panamericanos de Santiago 2023 arranquen. Para ser exactos, 264 días restan para aquel 20 de octubre en el que miles de deportistas empezarán a competir en Chile para uno de los eventos más importantes del continente. Y entre esos muchos nombres empieza a deslumbrar uno en especial: Rebeca Andrade.

La megaestrella del deporte brasileño, que con apenas 23 años ya ganó la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 en la prueba de salto de caballo y también es campeona mundial, llegará hasta nuestro país para competir en la prueba de gimnasia artística, y espera poder repetir las buenas actuaciones que ha tenido a lo largo de su carrera.

"Mi foco principal es mostrar mi trabajo y así poder incentivar y ser una inspiración para la superación"

La atleta oriunda de Guarulhos, en São Paulo, visitó nuestras tierras para ser presentada junto a otros cracks de distintas disciplinas como parte del Team Panam Sports que arribará a pelear con todo a los Panamericanos. Así, desde un principio reconoce como se siente de cara a la competencia.

"Yo estoy muy tranquila, me gusta siempre enfocada dentro de la gimnasia, ese es mi foco principal, mostrar mi trabajo y a través de mi gimnasia poder incentivar y ser una inspiración para la superación de otras personas también y es una oportunidad muy buena que el deporte me da. Y yo me siento muy orgullosa de eso", dispara de entrada.

Tras eso, cuenta sobre su preparación que "volví a entrenar ahora en enero, entonces estamos partiendo recién y ya se están poniendo más intensos, pero estamos muy enfocados en una competición tan importante así que vamos a dedicarle el 100% de todos los entrenamientos. Cada entrenamiento nos prepara para la competición y para obtener mejores resultados, así que entreno muy intensamente".

Con respecto a los resultados que espera de cara a Santiago 2023, Andrade apunta que "yo creo que el resultado es concecuencia de la competición y de nuestros entrenamientos, hay que estar saludable, feliz y conseguir hacer mis mejores presentaciones, yo creo que eso es lo principal. Si no estuviera feliz no valdría la pena estar en la competición, entonces hay que estar saludable, feliz y con un equipo súper unido para que podamos hacer nuestro mejor trabajo".

Sobre sus sensaciones por ser la primera y única brasileña campeona del mundo, confiesa que "yo me siento muy honrada de poder haber sido la persona que muestra todo el potencial que tiene nuestro país, y que hoy sea tan bien valorizado".

"Yo creo que las olimpiadas vinieron a ser algo muy bueno, un evento muy importante, muy grande y por la pandemia mucha gente tuvo que verlo desde sus casas, eso dio mucha visibilidad a la gimnasia y otros deportes y creo que eso hace una gran diferencia para nosotros", añade.

Complementa que para ella "poder llevar el nombre de Brasil junto a mis compañeras de equipo es sensacional, yo me siento muy orgullosa de todo lo que hemos hecho, con equivocaciones y con aciertos, todas las lesiones incluso me trajeron hasta aquí, entonces me formaron como atleta y la persona que soy, y ahora esto continúa".

Después, Rebeca es consultada por si cree que las dos medallas obtenidas en Tokio hicieron que los brasileños, conocidos en el mundo entero por su adicción al fútbol, se pusieran a alentar a la gimnasia. "Por supuesto, los que son muy fans y siguen la gimnasia hace mucho tiempo entienden bien la dificultad que significa poder crecer dentro del deporte", lanza.

Así, confiesa que "después de esas dos medallas yo creo que la gente empezó a creer mucho más en nuestro potencial y a apoyar todavía más, y eso trae una fuerza importante de creer en nosotros, saber que al final todo puede resultar si uno se dedica, independiente del dolor y las partes difíciles, todo vale la pena. Yo tuve varias posibilidades de no estar en Tokio, fue muy difícil para mí con las lesiones, pero mi red de apoyo es muy grande, yo soy muy agradecida de todo mi equipo, de la confederación, porque ellos están siempre a mi lado para conseguir tener los mejores resultados".

"Pero al mismo tiempo no están pensando solo en la Rebecca atleta, sino que también en la Rebecca persona y eso es lo que me hace volver todas las veces después de las cirugías, y eso hace el pueblo brasileño, cree en el deporte, la gimnasia y otras disciplinas", agrega.

Para cerrar, Rebeca envía un conmovedor mensaje a los niños. "Los invito a no desistir de los sueños, yo creo que el deporte es algo muy difícil, pero que entiendan que si no fuera difícil no valdría la pena, entonces para que sigan detrás de sus sueños, que tengan una buena red de apoyo, que crean en ellos y en su potencial, y lo más importante es ser agradecido de todo lo que le está sucediendo en la vida y llevar todo de la forma más liviana posible, con alegría y felicidad, cuando tú haces algo que amas de esa manera todo va a funcionar", concluyó.