Finalmente Nicolás Jarry fue castigado por 11 meses por doping, por lo que podrá volver a jugar a fines de año en el circuito de tenis profesional, situación que tiene feliz al chileno.
El Príncipe, mediante sus redes sociales, publicó un largo comunicado, donde dio a conocer cómo pasó estos meses de incertidumbre.
“Hoy contento y con mi conciencia tranquila, les cuento que fuimos capaces de demostrar en la investigación realizada por la ITF la procedencia de las sustancias prohibidas y detectadas y que éstas aparecieron producto de la contaminación cruzada que se generó en el laboratorio brasileño en el cual se producían las vitaminas”, señaló en primera instancia.
El nieto de Jaime Fillol, además, reveló que el castigo fue por un acuerdo que tomó con la Federación Internacional de Tenis: “he decidido aceptar el acuerdo ofrecido por la ITF y su sanción de 11 meses, que me permitirá volver a competir en noviembre. Extender estos procesos legales, sólo sumarían más estrés e incertidumbre a mi futuro profesional”.
“Me quedo con una lección muy importante en mi vida, de que sé que es mi responsabilidad profesional asegurarme que todo lo que consuma, no puede contener ni la más mínima contaminación”, agregó.
“Han sido meses de profundo dolor, y aunque honestamente a veces se siente un poco injusto todo lo que ha pasado, estoy intentando aprender lo que más puedo de esta situación, y sé que a fin de cuentas será una lección y de esas que te deja la vida, de la que son duda pretendo salir mucho más fuerte”, explicó sobre sus sensaciones.
Por último, el todavía número 2 de Chile agradeció a sus más cercanos por acompañarlo en el momento más duro de su corta carrera.
“Cierro este capítulo de mi vida con la conciencia tranquila y la lección aprendida. Asimismo me gustaría dar las gracias a mi equipo, mis auspiciadores y manager por haber creído en mí, en especial a mi entrenador Dante (Bottini)”, escribió.
Jarry podrá volver a las canchas en noviembre próximo, si es que el circuito profesional de la ATP se reanuda.
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