Este viernes el serbio Novak Djokovic barrió con el estadounidense Tommy Paul y se instaló en la final del Abierto de Australia por décima vez en su carrera.

Horas antes de aquel encuentro circuló en redes sociales un video en el que se ve a su padre, Srdjan Djokovic, compartiendo con seguidores del mandatario ruso Vladimir Putin, quienes sujetaban banderas de aquel país en las cercanías del Rod Laver Arena.

Tras lo ocurrido, el tenista quiso aclarar la situación: “He escuchado lo que él dice en el video. Dice ‘salud’. Desgraciadamente algunos medios lo interpretaron de un manera realmente equivocada”.

“Siento que el tema haya escalado tanto, pero espero que la gente entienda que no hay ninguna intención en absoluto de apoyar cualquier iniciativa relacionada con la guerra”, añadió.

Luego, explicó: “Mi padre, como él dijo en el comunicado, ha estado yendo a ver a mis seguidores después de cada uno de mis partidos en la plaza principal del Abierto de Australia para agradecerles el apoyo, estar con ellos, rendirles homenaje y hacerse fotos”,

“Había muchas banderas serbias. Él pensó que se estaba haciendo una foto con una persona de Serbia. Eso es todo. Ha pasado página”, complementó.

Sobre su propia experiencia con la guerra, aseveró: “Mi padre, mi familia entera y yo mismo hemos atravesado varias guerras durante los años 90. Como él dijo en un comunicado, nosotros estamos en contra de la guerra, nunca apoyaremos ningún tipo de violencia o guerra. Sabemos lo devastadora que puede ser para una familia o para la gente de un país”.

Djokovic se medirá con el griego Stefanos Tsitsipas en la gran final del Abierto de Australia y en caso de ganar recuperará el número uno del mundo, además de alcanzar a Rafael Nadal como el más ganador en torneos Grand Slam.