El histórico Wayne Rooney no tiene pelos en la lengua para dar su opinión, y tras asegurar que el fútbol está siendo empujado a volver muy pronto, desclasificó una jugosa anécdota en la que -a petición de sus compañeros de equipo- le dijo a su entrenador de aquel entonces que sus métodos eran una mie***.

"Cuando los jugadores no están contentos, a menudo van al capitán y terminas siendo tú quien presenta las quejas", aseguró el delantero en su columna en The Times, y agregó: "eso puede llevar a conversaciones difíciles. En un club me pidieron que fuera y le dijera al estratega que sus sesiones de entrenamiento no eran lo suficientemente buenas".

"No es fácil. Disculpe, entrenador. Los muchachos piensan que su método es una mierda", reveló el ex Manchester United, que tuvo la compleja tarea de llevar la opinión de sus colegas a oidos de su entrenador de aquel entonces, aunque no confirmó en qué equipo específicamente ocurrió la incómoda situación.

El delantero aseguró que ser la voz representante del plantel era una tarea muy difícil pero a la vez satisfactoria

El delantero aseguró que ser la voz representante del plantel era una tarea muy difícil pero a la vez satisfactoria

Pese a lo gracioso de la historia, Rooney aseguró que ser la voz del plantel no es una tarea del todo agradable: "puede ser mucho asumir. Tú representa a los jugadores en las reuniones sobre el trabajo de caridad y las actividades comerciales del equipo", reflexionó.

El actual artillero del Derby County reconoció que a pesar de las dificultades que acarrea la capitanía de un equipo, finalmente para él fue y es toda una alegría llevar la jineta en los distintos equipos donde ha jugado:

"Algunos países le dan menos importancia a la capitanía del fútbol, pero en Gran Bretaña tenemos razón al verlo como un gran honor. Capitanear Inglaterra, Manchester United y Everton fueron sueños hechos realidad para mí, y estoy orgulloso de usar el brazalete del condado de Derby ahora", dijo Rooney.

Finalmente el histórico ex diablo rojo aseguró en su columna que cualquier jugador profesional con cualidades de liderazgo disfrutaría la presión y la relevancia de ser el líder de un equipo y representar la voz de todos cuidando los intereses personales de cada uno de ellos.