Uno de los mejores partidos de la historia del fútbol se dio en el Mundial de Italia 1990, donde Argentina dio el golpe ante Brasil, duelo que podrás ver una y otra vez, y cuando quieras.

Aquella tarde en Turín el favorito era el Scratch, porque el por entonces campeón del mundo clasificó con muchos problemas a los octavos de final, pero el equipo de Diego Maradona tenía algo guardado.

Pasa que uno de los mejores jugadores brasileños, el lateral izquierdo Branco se "envenenó" debido a la picardía transandina, ya que bebió agua contaminada, lo que mermó su rendimiento.

Cuando faltaban sólo 10 minutos para el pitazo final, Claudio Paul Caniggia anotó tras pase del Diego, y timbró el acceso de la Albiceleste a cuartos.

Luego Argentina llegaría a la final, pero esa es otra historia.