Un jugador del Ryutsu Keizai Ogashi se hizo famoso a nivel mundial, luego de protagonizar una peculiar jugada en el partido frente al Kindai Wakayama por el Torneo Nacional de Fútbol de Escuelas Secundarias de Japón.

El partido terminó 1-1, con el Ryutsu abriendo el marcador a los 8 minutos y pudiendo aumentar con 19 tiros al arco. Pero finalmente el Kindai fue más eficaz y empató en la segunda parte.

El duelo debió definirse a través de lanzamientos penales y fue ahí cuando el jugador del Ryutsu pateó de una forma tan singular que se hizo viral.

En redes ya lo llaman “el penal más largo del mundo”, pues se tardó más de 30 segundos desde el pitazo del árbitro. Avanzó con pasos de hormiga, se frenó, amagó, continuó con pasos de hormiga y finalmente anotó.

Lo curioso de todo esto es que ni el referee ni el arquero rival parecieron inmutarse ante tal actuación del lanzador. Tampoco sus compañeros, quienes fueron enfocados tras el gol. Aplaudieron y celebraron, pero no se vieron caras de sorpresa, menos risas.

Lamentablemente, este penal no le sirvió a su equipo, que quedaría eliminado tras la tanda. Eso sí, le podrá contar a sus nietos que hasta en Chile rieron con su penal.