Japón se llevó uno de los primeros amistosos de la doble fecha FIFA de este mes de septiembre al imponerse con absoluta superioridad por 2-0 sobre Paraguay, dirigido por Eduardo Berizzo, en partido disputado en Kashima.

Uno de los principales focos de atención estuvo centrado en Takefusa Kubo, el jugador ficha del Real Madrid pero que actualmente se encuentra a préstamo. Empezó en la banca pero ingresó a mediotiempo para dar un auténtico recital.

 

El mediocampista de 18 años, quien fue canterano del Barcelona y que ya en la Copa América de Brasil empezó a mostrar sus credenciales a nivel de selección, soltó todo su repertorio frente a los guaraníes.

La defensa de Paraguay solo tuvo una respuesta al talento del japonés que mostró su habilidad con regates, taconazos y explosividad: el juego brusco. Kubo recibió varias faltas pero eso no lo impidió de demostrar su calidad.