La pretemporada de los grandes equipos de Europa ya está a tope con partidos amistosos en los que van mostrando sus armas. Uno de esos fue el Bayern Munich que disputó un compromiso ante el Ajax, que tuvo la posibilidad de ver muchos cambios en ambos equipos que empiezan a echar a andar sus ilusiones.
Estos han sido los primeros encuentros de Julian Naggelsman como director técnico de los bávaros y ve con qué piezas puede contar para la campaña que se avecina pero no sin antes pasar algunos disgustos como el que le causó Joshua Zirkzee en un mano a mano ante los de Amsterdam.
El delantero recibió la pelota entrando al área rival y con un buen gesto técnico se quitó la marca del guardameta rival, Remko Pasveer, quedando con todo muy fácil para mandarla a guardar y quebrar el empate a un tanto por lado que se vivía cerca del final del primer tiempo que se jugaba en Munich.
Sin embargo, la resolución está lejos de ser la mejor y se confió en exceso al ver el arco vacío, bajó el ritmo de su carrera, queriendo entrar prácticamente con la pelota al arco. En ese momento el defensor Perr Schuurs se avivó al barrerse heroicamente y quitando justo cuando se venía la definición.
La jugada causó molestia en Naggelsman pues Bayern Munich perdió un gol prácticamente hecho. El partido, tras los 90 minutos, terminó con igualdad 2-2 con un par de anotaciones más en el segundo tiempo.
