El entrenador portugués, Paulo Fonseca, quien tiene pasos por grandes clubes como Porto, AS Roma y Shakhtar Donetsk, se encontraba en Kiev, cuando comenzaron los ataque militares de Rusia a Ucrania.
En un diálogo online con Jornal de Noticias comunicó que estaba atrapado y desesperado por poder salir de la capital ucraniana, debido al peligro que corre ahí.
"Me desperté a las cinco de la mañana con cinco explosiones seguidas", dijo el director técnico, que está casado con la comunicadora ucraniana Katerina Ostroushko.
Luego, explicó: "Tenía un vuelo reservado para hoy, pero ahora es imposible salir de aquí, porque los aeropuertos han sido destruidos y el espacio aéreo ha sido cerrado".
"Lo único que podemos hacer es rezar para que no nos caiga una bomba encima. Sinceramente, no sé cómo voy a salir de aquí", añadió.
Actualmente la única vía para salir de Ucrania desde Kiev es por la carretera en dirección a Lviv, en la frontera con Polonia, pero los tacos son enormes.
"Es el peor día de mi vida. Ahora solo hay que esperar y tener suerte. Suerte para salir de Ucrania y dejar atrás la guerra", finalizó Fonseca.
Otro jugador que entregó su testimonio fue Marlon Santos, ex Barcelona. En entrevista con Mundodeportivo, el jugador del Shakhtar comentó: "La palabra es caos ahora mismo. Estamos protegidos aquí en el hotel, pero queremos soluciones. Es una situación terrible, hay miedo. Tenemos a nuestras familias, a nuestros hijos y mujeres, yo tengo también a mi suegra, queremos estar a salvo".
"Pero ahora hay mucha confusión. No puedes moverte porque hay tráfico por todas partes. Un trayecto de dos o tres horas, puedes tardar diez horas y se está acabando la gasolina. ¿Dónde vamos a ir, entonces?", agregó.
