Después de un primer tiempo muy disputado, el Tottenham finalmente encontró la apertura de la cuenta ante el West Ham United. Pero no fue cualquiera, sino una que está dando la vuelta al mundo.

 

Y no por mérito de los Spurs, sino por el tremendo error que cometió Tomas Soucek. El checo convirtió un autogol que, hasta ahora, le da la ventaja al equipo de José Mourinho, pero que da que hablar por lo increíblemente extraño que fue.

Cuando el reloj marcaba el minuto 68', el mediocampista fue a pelear un tiro de esquina a favor del Tottenham. Fue ahí que el balón se metió tranquilamente al centro del área, sin ser tocada por nadie. En ese momento, el hombre de los hammers se enrredó solo y anotó en su portería.