La semana pasada Mauricio Pochettino había dicho que creía que Neymar y Mbappé se quedarían muchos años en el PSG, además de no descartar una posible llegada de Leo Messi al equipo.

Este domingo fue Neymar quien confirmó que no se moverá de París: “Me quedó en el PSG y espero que Mbappé también”. Y un día después fue el turno del campeón del mundo, quien en una entrevista con France Football insinuó que permanecerá al lado de Ney.

“Siempre he creído que los grandes jugadores están hechos para jugar juntos. Y eso estaba claro entre nosotros. Los estatus estaban establecidos desde que llegué a París: Neymar es el centro del proyecto y yo estoy ahí para ayudarle. Porque cuando llegué al PSG, yo no era una estrella emergente y debía confirmarlo en el campo”, señaló Mbappé.

El delantero de la selección francesa no escatimó en loas al brasileño: “Neymar sabe hacer todo. Es el mejor de todo el mundo. Cuando llegó a París, nos dimos cuenta de todo lo que hace. No es un jugador simplemente que hace espectáculo y baila cuando vamos ganando 5-0. Sabe también hacer cosas espectaculares con 0-0. No sé si todo el mundo es consciente, pero Neymar comprende todo. Tiene un instinto que le hace saber todo al instante”.

Sobre su relación con Neymar, afirmó: “Siempre ha habido mucho respeto y honestidad entre nosotros. Es la base de nuestra relación, Ney es alguien al que aprecio verdaderamente. Cuando volví del Mundial, estaba triste por él. Intenté cambiarle de tema respecto al Mundial”.

“No le hablaba mucho de fútbol, sobre todo del entorno, del público, de los aficionados… Pero era complicado porque no hablaba ni inglés ni español. Siempre teníamos necesidad de intentar hablar con otra persona para que interpretara nuestras palabras. Fue bastante más práctico meses después una vez que yo empecé a hablar inglés”, añadió.

Finalmente, desmintió que el ex Barcelona sea conflictivo en el camarín: “Neymar es un buen chico. Francamente. Lejos de esas caricaturas de chico arrogante, no olvidaré nunca cómo me ayudó en mis inicios. Cuando tienes 18 años y llegas a un gran vestuario, nunca es fácil. En estos grandes equipos, el 60% de tu éxito depende de tu fútbol y el otro 40%, de lo que te aclimates al vestuario. Él me ayudó y no lo olvidaré”.