La cosa es clara: Manuel Pellegrini no ha hecho una buena campaña en el West Ham y si no le gana al Southampton este fin de semana, es una probabilidad no menor su despido.
El mismo Ingeniero ve venir este escenario y no se hizo el loco. “Lo que realmente necesito es ganar el partido, pero tal vez no esté en mi trabajo el lunes”, lanzó.
Asimismo, aseveró que “dije cuando llegué aquí que venía a intentar que el fútbol del equipo fuera diferente al de los años anteriores, no solo para evitar el descenso. Ese no es mi objetivo, pero lógicamente no estoy contento”.
West Ham marcha en el puesto 16 de la Premier League y, de perder con el Southampton este sábado a las 14:30 horas, caerá a zona de descenso.