El pasado 1 de mayo, el planeta fútbol se enteraba del lamentable suceso: Iker Casillas, el mítico arquero y capitán de la selección española campeona del mundo en 2010, sufrió un infarto de miocardio durante la práctica del Porto.

 

Dos meses después y luego de una larga lista de especulaciones, el español decidió poner una pausa en su carrera y así poder realizar un tratamiento correcto para su problema. Eso sí, Iker no se alejará del fútbol, pues desde hoy asume como parte del staff directivo del club.

 

 

"Voy a hacer algo diferente de lo que solía hacer, que era estar en el campo. Intentaré hacer de conexión entre el equipo y el club. El míster me dijo que quería que me quedara con ellos, cerca de los jugadores, cerca de los más jóvenes porque habría muchos cambios. Trataré de hacer lo mejor para ayudar a mis compañeros ", aseguró Casillas en conversación con el sitio oficial del Porto.

 

De esta forma, Casillas deja en alto su brillante carrera deportiva, donde consiguió 19 títulos con el Real Madrid, cinco con la selección española y dos con el Porto.